La época de oro del cine mexicano fue un periodo de abundancia y prosperidad para la industria nacional. La producción brilló por su abrumadora calidad y su éxito comercial fue un buen augurio de consolidación para la industria fílmica en México. Hubo bastedad de géneros y realizadores, cuyos trabajos son recordados con cariño entre la población del país. La otra (1946), dirigida por Roberto Gavaldón y escrita por José Revueltas, es una de las películas con mayor prestigio de la época y se cuenta entre las más influyentes del país.

La película cuenta una trágica historia de codicia. María y Magdalena son dos hermanas gemelas separadas por una amplia brecha socioeconómica. La vida de María no ha sido fácil, con su misero sueldo como manicurista apenas puede permitirse una pequeña vivienda y mientras ella no se puede permitir ningún lujo, Magdalena se engalana con opulencia y vive tan cómodamente como la realeza. En un arrebato de envidia, María asesina a su hermana y se hace pasar por ella. Su nueva vida promete un futuro abundante, hasta que los actos ilícitos de su hermana la toman por sorpresa. Su pavoneo con la riqueza llega a un punto muerto y termina respondiendo por crímenes que ella no cometió.

La cinta tuvo una avasalladora presencia en la segunda entrega de los premios Ariel y, aunque tuvo numerosas nominaciones, el único premio conseguido fue el de mejor guion adaptado, obtenido por el escritor José Revueltas.

José Maximiliano Revueltas Sánchez fue un literato, guionista, crítico y activista político. Nació el 20 de noviembre de 1914, en el seno de una familia de comerciantes con residencia en Durango. Su infancia y la de sus hermanos, se vio fuertemente afectada por el empeño con que sus padres buscaban transmitirles su amor por los libros.

En pleno tránsito de infancia a adolescencia, su familia tomó la decisión de migrar a la Ciudad de México. El pequeño José incursionaba con frecuencia en La Merced. Su testimonio de las luchas diarias de mexicanos con escasos recursos contribuyó a su pronta inclinación por el comunismo.

Con tan sólo 15 años, ya formaba parte del Partido Comunista Mexicano (PCM). Asociación que perpetuó los constantes encarcelamientos de José; en 1929, por alzar una bandera roja en la asta principal del zócalo. Después, dos veces más en las Islas Marías: la primera vez en 1932, cumplió una condena de cuatro meses y la segunda en 1934, una de nueves meses.

Finalmente, en el año 1968, participó activamente en el movimiento estudiantil que culminaría en la aciaga matanza de Tlatelolco. José fue perseguido por las autoridades bajo el cargo de autor intelectual del movimiento. Tras una prolongada persecución fue confinado en Lecumberri, con una condena de 16 años. Dos años después salió de prisión bajo palabra.

Para ese entonces su salud ya estaba comprometida. Seis años después, en 1976, falleció dejando tras de sí un largo legado de obra literaria.