El diablo entre las piernas
Por Sofia Espinosa
Arturo Ripstein, uno de los autores esenciales de la historia del cine mexicano, regresa con un largometraje sobre la represión sexual y la decadencia marital.
Con una filmografía de más de 30 producciones, el veterano autor mexicano Arturo Ripstein, junto a su guionista imprescindible Paz Alicia Garciadiego, ha dedicado sus relatos más recientes a las vidas decadentes de mujeres encerradas y desfavorecidas por el destino, con atmósferas lúgubres y callejeras bellamente encuadradas en blanco y negro. Luego de Las razones del corazón (2011) y La calle de la amargura (2015), El diablo entre las piernas presenta una situación semejante, esta vez enfocada en los celos y la sexualidad en la vejez.
La historia se centra en Beatriz ( Sylvia Pasquel) una mujer de tercera edad que es víctima de insultos y vejación por parte de su esposo celoso ( Daniel Giménez Cacho). Una tóxica relación, que nos habla de pasiones, deseos y repulsiones que aún ni la edad logra vencer.
A la edad ni al cuerpo, se le olvidan los deseos – Sylvia Pasquel.
Sylvia Pasquel habla sobre el halago que sintió por formar parte nuevamente del trabajo de Arturo Ripstein y de Paz Alicia, donde se nos va conduciendo a un discurso en el que los personajes, no son dueños de su mundo ni de lo que hacen.
No voy a pelearme con mi idioma, voy aliarme con mi idioma – Paz Alicia.
Con mas de 35 años de trayectoria, Paz Alicia es conocida como una de las personalidades más importantes del guion dentro del cine mexicano; reconocida por su adaptación de cuentos y novelas de autores como Juan Rulfo. Cuando nos adentramos a conocer su trabajo reconocemos que debemos ser subversivos para poder entender los discursos sonoros y visuales de su definido lenguaje poético.
La palabra se arrebata ganando el interés del escucha.
Personajes que llegan hasta sus ultimas consecuencias y que buscan abiertamente un amor perfecto, es lo que nos permite ver Paz Alicia, al introducir sus mundos y personajes, en donde través de su escritura nos invita a conocer el rompimiento de una cotidianidad.
La realidad es una construcción barroca del mundo, un mundo que se construye del pecado y la desesperanza, un lenguaje coloquial y armónico que resuena belleza.
Creadores anónimos y olvidados, es como define Paz Alicia al trabajo del guionista en México actualmente, una omisión generada por su propio espectador. El arte es trastocar estados de ánimo, está para conmover y remover la visión del mundo, un arte que no es subversivo no es arte. Por lo que a esto, Garciadiego nos invita a generar a un espectador más crítico que sea capaz de crear un mundo al cual escapar y tomar revancha de este.
Dentro de sus trabajos más destacados nos encontramos con películas como ¨La perdición de los hombres¨- 2000, ¨El coronel no tiene quien le escriba¨- 1999, ¨Profundo camersí¨- 1996, ¨Mentiras piadosas¨ – 1989, ¨La reina de la noche¨-1994, ¨El imperio de la fortuna¨- 1986; premiadas en festivales como TIFF, Venecia, Arieles, Festival Internacional de Cine de San Sebastian, Premios Goya. En 2019 fue premiada al ¨Ariel de Oro a la Trayectoria”, siendo una de las primeras guionistas en recibirlo.
La humanidad del ser humano esta construida del pecado y ahí esta la humanidad, a mí no me gusta escribir sobre los santos, a mí me gusta escribir sobre los pecadores.
El trabajo visual que logran Ripstein y Garciadiego es sumamente exquisito, una labor profundamente poética que nos invita a vivir dentro de una realidad, su etapa más pura y melancólica.
El diablo entre las piernas fue seleccionada en el Festival Internacional de Cine de Toronto y en el Festival Internacional de Cine de Morelia, y podrá verse del 21 al 26 de noviembre en la Cineteca Nacional como parte de la 67 Muestra Internacional de Cine.
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