Destinos Embrujados

Por Sofía Espinosa

¿Cómo? ¿Cuándo? y ¿Quién? son preguntas que reflexionamos al escribir de Carlos Carrera.

Conocido como uno de los cineastas mexicanos más prolíficos de la industria, Carrera es un realizador distinguido por contar historias de interés humano; discursos cotidianos que nos vuelven a reconectar con el desinterés que hoy existe dentro de nuestra cultura, destinos escritos y aceptados de un México  parecido al actual.

Volver a enlazarnos con nuestro origen, aprender a observarnos y conocernos a través del cine, es lo que nos expone este director dentro de sus filmes “El héroe”(1993), “Backyard: el traspatio” (2009). Cada historia tiene una forma de contarse, Carrera aconseja pensar, comunicar y conocer la actualidad de su público.

Enfrentarnos a nuestra realidad es un trabajo que requiere de una preparación, es por esto que si tienes en mente ser un buen realizador o guionista, debes aprender a beber historias; leer, vivir y conocer.

Todo es un proceso que  nos encamina a nuestra propia historia.

 « Una ves que tengas la historia empezarás hacer cine y no necesitaras el permiso de nadie. Hacer es la mejor forma de aprender » Carlos Carrera

Estudiar a los personajes es de suma importancia para este director, seguir la lógica y darle a cada uno el valor suficiente para que lleve sus acciones hasta el final. No hay que imponer comportamientos desde la posición del director o guionista si no el de seguir la lógica interna de su vida dentro de esa ficción; es muy importante respetar la vida de cada uno de tus personajes.

« Me gusta que mis personajes sean lo menos extraordinarios posible, porque a los personajes ordinarios les suceden cosas extraordinarias dentro de su vida cotidiana » Carrera

Con mas de treinta años de trayectoria Carlos carrera es conocido por ser nominado y ganador en festivales como Cannes – Palma de Oro a mejor cortometraje de animación  “El héroe”(1993), Ariel a mejor guion adaptado, mejor dirección, mejor película, mejor ópera prima, mejor cortometraje de animación, mejor largometraje de animación; “Un embrujo” (1999), “Sin remitente” (1996), “Backyard : El traspatio”(2010), “La mujer de Benjamín” (1992), “De raíz”(2004),  “Ana y Bruno”(2017), Premios Goya, Chicago Internacional Film Festival, Havana Film Festival, Festival Internacional de Cine de Guadalajara, entre otros .

En el año 2003 Carrera tuvo una nominación a los Premios Oscar  y los Golden Awards en la categoría a mejor película extranjera por “El crimen del padre Amaro”.

Medir el éxito de tu película es como lanzar una moneda al aire, conectar con tu  público y realidad tiene mayor peso, que el ambicionar con premios basados en perspectivas acercadas a un círculo que esperas que tengan tu mismo gusto, forma de ver y percibir la vida; eso es  lo que nos invita a reflexionar Carlos Carrera acerca del alcance que deseamos de nuestras historias; hacia donde queremos llegar, hacia quien queremos llegar.

 « No hay, no se puede y no se pudo » Backyard : El traspatio. 

Todo se basa en perspectivas, el cómo compartimos información se definirá por el valor y trascedencia de la honestidad creativa que aportaras hacia ti y tu espectador.

Carlos Carrera nos habla dentro de una mirada muy honesta, que no trata de imponer si no de exponer un México que ha sido embrujado por la falta de conocimiento que hemos perdido y nos han arrebatado; ciclos repetitivos sin fin que ahora se han vuelto rituales, ya se sabe y nadie se agobia.

¿Pero qué hace que sus filmes sean tan poderosos y dejen de qué hablar? como te he mencionado antes, todo se rige en conocer lo que quieres decir, por lo que no debes agobiarte en el caso de que aun  no tuvieras claro de que hablar, el trabajo, la disciplina e importancia que le des a tus historias se reflejara con base al tiempo; esta en el creador ser constante.

Conocer nuestra cultura y hacer que nuestro público vuelva a reconectarse con su arte es algo que requiere tiempo, pero al igual que Carlos Carrera solo debes compartir una mirada creativa para romper el embrujo de un destino que aun se puede corregir.

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