Lee el guion de Toy Story 4

Por Luis F. Campos

Para aprovechar el próximo lanzamiento de Disney+ a México, en esta ocasión hablaré de una de sus franquicias más importantes de animación: Toy Story. A lo largo de su historia, Walt Disney le ha dado al público infinidad de películas animadas que se han vuelto un clásico, desde películas ya antiguas como “La
espada en la piedra” o “Fantasía” hasta películas más recientes que nacieron ya sea en los primeros años del nuevo milenio o en los últimos años del siglo pasado.

Una de ellas es Toy Story, película recordada por ser una de la primera película generada totalmente con animación 3D que gozó de un increíble éxito a nivel mundial, a tal grado que no solo fue todo un evento cinematográfico, sino que fue el inicio de una nueva franquicia que constó de 4 películas (en mi humilde opinión, como trilogía es perfecta), una gran cantidad de cortometrajes, además de infinidad de otros productos como juguetes, ropa, accesorios, etc. Sin embargo, esta historia no tuvo un principio tan brillante como lo ha sido su existencia general.

La historia que nos cuenta las aventuras de el vaquero Woody y el astronauta Buzz Lightyear (o como algunos lo recuerda con humor “Buzz Yogurt Light), es sinónimo de oro puro para las ganancias del estudio, pero pocos recuerdan que John Lasseter, el creador de esta popular saga animada, fue rechazado al menos un par de veces por el estudio al presentar la historia por primera vez. Pero no fue sino varios años atrás cuando todo comenzó.

A principios de la década de los 80s, en 1982 para ser exactos, Walt Disney se encontraba sufriendo una crisis creativa y económica, y fue ahí cuando Lasseter presentó al estudio su primera idea arriesgada, adaptar el cuento “La tostadora valiente” de Thomas M. Disch, que al igual que Toy Story, quería hacerlo de manera totalmente digital, una historia con toques existencialistas acerca de unos utensilios de cocina que se embarcaban en una aventura para buscar a su creador. Una premisa que desde su primera lectura nos hacer entender por qué la insistencia de Lasseter para querer llevarla a la pantalla. Sin embargo, fue rechazado y despedido, con lo cual optó por trabajar en un estudio diferente, LucasFilms, donde crearía el primer personaje animado por computadora en la historia del cine, un caballero medieval dentro de la película “El secreto de la pirámide” de Barry levinson de 1985. Poco después, en 1986 y junto con el genio de la tecnología Steve Jobs, Lasseter fundaría Pixar.

A finales de los años 80s, Walt Disney pasó por un cambio de visión dado por un cambio de mando ya que la dirección de la compañía pasaría a manos de Jeffrey Katzenberg, quien una de sus primeras acciones sería la compra de Pixar, con lo cual trajo de regreso a Lasseter a trabajar con el estudio que pocos años atrás lo habían rechazado. Al igual que Bob Iger en los últimos años, Katzenberg era un visionario a futuro y veía mucho potencial en la animación que quería realizar Pixar.

Con negociaciones que cerraron en 1991, Lasseter había vuelto al estudio del ratón. Un par de años más tarde, Lasseter estaría buscando que Disney le autorizara la realización de su primer largometraje, lo que convertiría en una larga búsqueda, ya que cada idea original que le daba a Katzenberg era rechazada. Tal era el grado de rechazo que al hacer una primera proyección de prueba de Toy Story, el director en turno de Disney decidiría cancelar la producción, recibiendo críticas como “Woody es un imbécil”, pero los integrantes de su propio equipo argumentaban a favor de Lasseter, explicando que le había pedido tantos cambios que ya no era su propia película.

Tras estos acontecimientos, Lasseter suplicó por dos semanas de trabajo en las que reescribiría totalmente el guion, semanas que fueron propiamente financiadas por su compañero de Pixar, Steve Jobs, Lasseter se encerró junto con Josh Wheddon (director de The Avengers 1 y 2) y Pete Docter (director de Monstruos SA y Up), para afrontar algunas de las demandas y peticiones que Katzenberg quería imponer para la película, siendo una de ellas que quería hacerla musical, una película en la que los personajes cantaran.

Ante la evidente negación de los escritores a cargo, incluyendo al creador de los personajes, Disney consiguió únicamente que se escucharan 3 canciones importantes en la película, pero ninguna de ellas siendo cantada por los personajes.

Así, con el apoyo financiero de Disney y únicamente 110 animadores, se llevaría acabo la realización de Toy Story, una de las películas de animación que actualmente podrían ser consideradas de culto y que marcaron un antes y un después en la historia del cine de animación. A pesar de haber tenido muchas trabas en su producción, el resultado final sería altamente favorable para el estudio, al ser la película más taquillera del año en 1995, lo cual traería consigo la inevitable expansión de las aventuras de estos personajes, presentando en la primera película una historia sencilla para presentar a Buzz y Woody, permitiéndonos conocer el origen de su relación de amistad tan legendaria, pasando de una rivalidad a prácticamente considerarse como hermanos… jueguetes.

Unos años más tarde, Disney Pixar estrenaría Toy Story 2, película que nos presentaría a una gran cantidad de personajes nuevos para la saga, tales como la vaquerita Jesse y Tiro Al Blanco, el fiel corcel acompañante de todo buen vaquero, además de los inolvidables marcianos cuya frase quedó inmortalizada como uno de los diálogos más memorables de la franquicia “Nos has salvado, estamos agradecidos”, siendo adoptados literalmente por esta gran familia de juguetes, en especial por la pareja Cara de Papa.

Pasaron varios años para que la trilogía pudiera realizarse. No pasaba un año sin que los fans esperaran la tercera entrega de Toy Story y no fue sino hasta el 2010 que Disney Pixar estrenaría esta tercera parte de la popular franquicia. En esta ocasión y debido a la cantidad de años que habían pasado, muchos niños que
habían visto las primeras películas en el cine, ya eran adultos o adolecentes como mínimo, por lo cual fue una película que no solo llegó al corazón de las generaciones que crecieron con las primeras dos películas, sino también entraría a los corazones de una nueva generación. Por si no fuera suficiente, y con la increíble recaudación en taquilla que lograron, la película obtuvo diversas nominaciones a los Premios Oscar, destacando su inclusión en la categoría principal, Mejor Película, aunque no se llevó ese oro a su casa, si se llevó el de Mejor Película Animada, un reconocimiento más que merecido.

Aunque para muchos (incluyéndome), esta película marcó el cierre perfecto para los arcos argumentales de los personajes, el estudio no se la pensó dos veces y confirmaron la realización de una cuarta entrega de la saga. Situada algunos años después, esta vez marcaría una separación definitiva de los personajes principales, haciendo que cada uno de ellos vaya por su propio camino. Una decisión bastante polémica para los que crecimos con estas películas, pues su valor principal era la unión y la familia. Sin embargo, esta película no hizo más que recalcar el poderío actual de Disney Pixar en la industria, haciendo no solo una recaudación bestial en taquilla a nivel mundial, sino también logrando una vez más la nominación al Oscar en la categoría de Mejor Película Animada y llevándose de nueva cuenta el oro a casa, aunque esta vez ya no sería nominada para la categoría reina de la noche.

Así, Toy Story es recordada por muchos como una de las mayores sagas de animación en la historia del cine. Marcando un antes y un después en la manera de ver y hacer estas películas y demostrando que un buen personaje no necesita tener un gran físico o ser humano siquiera, solo necesita tener buen corazón para ser entrañable y, para lograr ser recordado, un buen arco de personaje sin importar en qué empaque de presentación venga.

Por ello, aquí les dejó el cierre de la saga de estos icónicos juguetes, para todo
aquel que quiera leer el guion de Toy Story 4, aquí lo podrán encontrar.

@EscribeCine